La nueva Sharapova habla portugués
MADRID.- '¡Vamos, é agora!'. La exclamación retumbó en toda la pista. La grada, incrédula, tardó en reaccionar tras el punto logrado por Michelle Larcher de Brito, una portuguesa de 14 años capaz de sumar en Miami su primera victoria como profesional. Nadie lo duda ya, ella es el nuevo prodigio de la academia de Nick Bollettieri.
El punto, celebrado con rabia, supuso el 6-6 en el marcador del tercer set ante la jugadora local Meghann Shaughnessy, que le dobla en edad y supera en más de una cabeza de estatura. "Agora" (ahora), gritó entonces De Brito, y a por el partido fue con la decisión de una veterana. Sumó los seis primeros puntos del 'tie break' final. Atenazada por los nervios, cedió los tres siguientes, pero Shaughnessy le dio el empujón final al enviar fuera su último golpe.
De rodillas, incapaz de mantenerse en pie tras más de dos horas de batalla, De Brito aún no sabía que ese golpe le convertía en la segunda jugadora más joven de la historia en sumar una victoria en el prestigioso torneo de Florida, sólo por detrás de Jennifer Capriati, octavo finalista en su primera participación pocos días después de cumplir los 14.
De Brito se siente en Florida como en casa. Aunque su padre, Antonio, de 39 años, no se separa de su lado y sigue siendo su primer entrenador y consejero, desde los nueve años ella completa su formación en la academia de Nick Bollettieri en Bradenton, una escuela de prodigios de donde salieron, entre otros, Andre Agassi, Jim Courier, Monica Seles, Mary Pierce, Anna Kournikova, Nicole Vaidisova, Daniela Hantuchova o Maria Sharapova, y por donde pasaron en algún momento de sus carreras Venus y Serena Williams, Pete Sampras, Boris Becker, Iva Majoli o Tommy Haas.
Gracias a su establecimiento en Florida obtuvo una invitación para el torneo más importante del circuito, aparte de los Grand Slam, y ya la ha aprovechado. Su triunfo no sorprende a todos. Quienes siguen su evolución ya descubrieron su potencial al ganar con 12 años en individuales y dobles el prestigioso Eddie Herr Championships, un torneo para menores de 16. Tiempo atrás, Maria Sharapova logró el mismo éxito pero con un año más que la portuguesa.
Nacida el 29 de enero de 1993, bate récords de precocidad y algún técnico del equipo de Bollettieri ya ha visto en ella a la próxima Monica Seles. La portuguesa es la única jugadora júnior (hasta 18 años) nacida en 1993 ubicada entre los 100 primeros puestos del ránking (64), y en Miami disputa su segundo torneo profesional tras caer tres sets en la primera ronda de Midland ante la veterana Kristina Brandi.
Jugadora sólida desde el fondo de la pista y con un poderoso revés a dos manos "tiene capacidad para ser 'top ten', 'top five'... quién sabe", analiza Bollettieri. "Es una jugadora muy ofensiva, con un movimiento impecable y una gran coherencia en la pista. Además, es muy competitiva".
Sesil Karantcheva, una promesa búlgara que con 16 años vio cortada su progresión al resultar positivo un análisis antidopaje realizado en 2005 tras alcanzar los cuartos de final en Roland Garros, por el que recibió una sanción de dos años, habla maravillas de De Brito: "Claro que conozco a Michelle", explicó un día al portugués 'Jornal do Ténis'. "Todos la conocen, es la preferida de Nick Bollettieri. Siempre quiere entrenarse y jugar, es un espíritu ganador, siempre da el 150% y posee un juego muy natural. Será una campeona".
Edição digital do El Mundo, cortesia do amigo Ronaldo Veitia, a quem agradeçemos.